Mientras la “canalla” política dirime sus cuitas en torno a quien es el culpable de que, después de unas semanas de la irrupción (por sorpresa) de las lluvias torrenciales, aún no se haya retirado todo el escombro, cañas, mierda en general, etc que se encuentra acumulado en las ¿playas?, la ciudad entera sufre una plaga de moscas. ¿Lo han notado?. Asquerosos animalitos que según leí no se donde, una pareja de ellas son capaces de reproducir doscientas crías en quinces días. Multipliquen y vean lo que suponen en número de moscas nacidas en un mes. Bueno, pues a ninguno de nuestros ilustres regidores medioambientales que con tanto afán trabajan para y por nosotros en el Ayuntamiento, se les ha ocurrido dar prioridad a la limpieza y retirada urgente de todo el material orgánico y en descomposición apilado en la orilla de las playas, y por lo tanto caldo de cultivo para la reproducción de las pegajosas y repulsivas criaturas, y de esta guisa nos encontramos que servidor, por poner un ejemplo, tiene en el salón de su casa más moscas que en el dormitorio de un gorila.
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